Duque finalmente se da cuenta de la gravedad del problema que tiene por delante. Por su parte, Dolly comparte con Margarita información valiosa sobre Duque y lo que ocurrió con ella.

Desde el centro de salud, Duque llama a Margarita para pedirle perdón y despedirse. Sus amigos temen que esté pensando en hacer algo malo y deciden ir hasta allá para hablar con él.

Margarita y los compañeros de Duque van a visitarlo al hospital, pero al llegar Margarita se encuentra con una situación terrible.

Margarita habla con Duque en el hospital y lo anima a seguir adelante. Sin embargo, después de su charla los ánimos cambian drásticamente.

Mientras Plata y Orrego discuten acerca de lo ocurrido con su amigo, Margarita trata de ayudar a Duque. Por otra parte, la frustración del Cuentagotas aumenta después de que Duque se les escapara.

Mientras los criminales hablan con Irma y sus padres sobre la desaparición de Duque, Margarita continúa animando a su amigo a que vea el lado positivo de la vida.

A pesar de que no logra despejar sus dudas, Margarita se siente feliz de poder ayudar a Duque. Por otra parte, Plata y Orrego comienzan a preparar un plan para ayudar a su amigo.

Mientras el Cuentagotas le da nuevas órdenes a sus ayudantes, Duque se prepara para tener una de las peores conversaciones de su vida.

La conversación con Lombana toma un nuevo rumbo cuando Duque comienza a pensar en lo que le dijo Margarita. A pesar de todo lo malo que le ha pasado, Duque parece haber encontrado un nuevo camino en su vida.

Después de la conversación con Lombana, Duque se siente listo para hablar con sus amigos, Irma y sus suegros.

Antes de irse de su casa, Duque le habla a Irma de un modo que deja ver la forma en que su amarga experiencia le ha cambiado la visión de la vida.

Mientras que Duque parece haber encontrado el secreto de la verdadera felicidad, el Cuentagotas sigue obsesionado con su captura. Por otra parte, Margarita no ve la hora de compartir con Duque una gran noticia.

Un misterioso empresario francés llega a Bogotá, pero pronto descubrimos que no podemos confiar en las apariencias.

El enigmático turista francés demuestra que la seducción es la mejor manera para conseguir información.

Wilson deja de pretender ser un hombre de negocios francés cuando se encuentra con un viejo conocido.