Mientras Ignacio Román habla de sus negocios se da cuenta de la presencia de una persona que no esperaba encontrar en el evento.

Ignacio Román está jugando con fuego en el evento de la embajada y muy pronto terminará quemándose a pesar de ser visto como uno de los hombres más afortunados de la fiesta.

Isabel e Ignacio sostienen una intensa conversación. Mientras tanto el agente Jaime se decide a dar el paso que tanto estaba esperando.

Ignacio y el agente Jaime están en estado de tensión durante el evento. Además de ello, una inesperada conversación está por cambiar el destino final de la noche.

Mientras que el embajador discute con Jaime, Ignacio decide hacer un movimiento inesperado.

Mientras Ignacio habla con Isabel y Amalia en la terraza, el agente Jaime lanza un grito que sumergirá el evento en un total caos.

La policía ha rodeado el edificio y el destino del gran estafador parece estar ya escrito... o, ¿no? ¡Disfruta de este gran final!

Después de una escena de tensión en la cafetería, el sueño de ganar la lotería se apodera de algunos de los principales protagonistas de esta historia.

Con los resultados de la lotería, las burlas de sus amigos y el pago de su quincena, el día de Duque solo va de mal en peor.

Duque trata de razonar con Lombana acerca del dinero que le hace falta de su quincena pero a su jefe no le convencen sus explicaciones. Veamos si Duque podrá convencerlo.

Después de rechazar la invitación de sus compañeros de trabajo, Duque tiene la oportunidad de intercambiar un par de palabras con Margarita.

La llegada de Duque a su casa nos deja ver que los abusos que sufre en su vida no se limitan al entorno de trabajo.

En medio de la comida con su esposa y sus suegros, Rodrigo Duque recibe una inesperada visita que solo le ayuda a empeorar el desastroso día que ha tenido.

Después de una noche amarga, Duque comienza su día afrontando más problemas. Sin embargo, espera poder encontrar algún tipo de ayuda en sus mejores amigos.

No todo es totalmente negativo para Duque en su trabajo tal y como lo demuestra la conversación que sostiene con alguien durante el almuerzo.